lunes, 29 de marzo de 2010

De cómo (no) establecer contacto con el otro género en un museo

Era una mujer bella, una bella mujer hermosamente embarazada. Él se acercó disimulando, parecía un buen hombre sonriente, y sin timidez le dijo Es maravilloso dar vida ¿No te parece? Tienes ya padre para ese bebé.
Ahora en la cara cinco dedos le sonrojan. Ella se ofendió, él no lo entiende, no vale para galán Era un piropo.

2 comentarios:

  1. buenísimo!! no sabía que estabas ese día en el museo! todavía me duele el tortazo
    sigue así de grande!
    pirulo

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  2. me dejas de piedra si estabas por ahí!
    la venus perdió así el brazo, dice la no leyenda.
    gracias!

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